En la mayoría de los Estados Unidos, el agua dura circula por las tuberías y afecta de forma silenciosa, pero costosa, a los electrodomésticos y tuberías que utilizan agua.
"Si crees que no te afecta, piénsalo otra vez: el 85% de los estadounidenses tienen agua dura", dice Angie Hicks, fundadora de la web dedicada a reseñas de consumidores sobre contratistas y empresas de servicios. "El agua con un alto contenido en minerales es realmente dura para sus electrodomésticos y puede restarles años de vida útil". Hicks aconseja que los propietarios estén atentos a las siguientes señales de alarma para saber si su agua es un problema:
- Reducción del suministro de agua caliente de un calentador de agua de depósito tradicional
- La ropa está sucia después de pasar por la lavadora.
- Anillos o depósitos de calcio en bañeras, fregaderos y lavavajillas
- Atascos en duchas y grifos
- Platos, vasos y cubiertos manchados o sucios después de que el lavavajillas haya funcionado
- Fugas en tuberías de agua
Determinar si tiene agua dura es sencillo y relativamente barato. El primer paso es analizar el agua, dice Hicks. Algunas empresas de servicios públicos y departamentos de salud ofrecen este servicio, pero las empresas especializadas en el acondicionamiento del agua también lo ofrecen, a menudo de forma gratuita. Como esas empresas tienen intereses creados en el resultado de esos análisis, los consumidores deberían plantearse obtener al menos una opinión externa.
Los consumidores tienen varias opciones para eliminar el calcio y el magnesio, los molestos minerales que endurecen el agua. Los descalcificadores tradicionales utilizan sal para eliminar esos minerales. Los aparatos que no utilizan sal para conseguir lo mismo suelen llamarse "acondicionadores de agua" o "descalcificadores".
Estos son los consejos de Angie's List para comprar un descalcificador:
- Los descalcificadores pueden oscilar entre unos cientos de dólares y más de $1.000 en función del tamaño y el tipo. Algunas empresas ofrecen equipos de alquiler por un precio mensual simbólico. La instalación suele costar entre $150 y $300.
- Antes de comprar un descalcificador o acondicionador de agua, investigue los productos disponibles y las empresas de servicios. Exija una garantía de devolución del dinero.
- En la mayoría de los estados, la instalación no requiere un fontanero autorizado. Como mínimo, recurra a una empresa con técnicos certificados por la Water Quality Association.
- Comprenda y siga el mantenimiento necesario para que la unidad funcione correctamente.